Naciendo en casa – Modelo de partería
“Ser partera te pondrá en peligro de que tu corazón sea perforado, pero eso está bien, porque cuando eso ocurre, mucho amor sale de esa manera. Te hará una mejor partera”
Partería Espiritual, Ina May Gaskin.
¿Cómo es el Modelo de atención de Partería?
El modelo de partería se fundamenta en la premisa de que la gestación, el parto y el nacimiento son acontecimientos saludables y fisiológicos de la vida con una dimensión espiritual.
Concibe la atención desde un punto de vista integral incorporando conceptos, destrezas y conocimientos procedentes de una variedad de ciencias ancestrales y actuales junto con las consideraciones éticas sobre la salud y los derechos sexuales y reproductivos.
Confía en la capacidad del cuerpo de las mujeres para dar a luz y ofrece un cuidado personalizado, continuo y no autoritario, anticipador y flexible, basado en la toma de decisión informada, respetuoso de la diversidad cultural, centrado en la mujer, consciente de los aspectos físicos, emocionales, psico-sociales y sexuales del embarazo, parto y nacimiento.
La partera es la proveedora más adecuada para la atención durante el embarazo, parto y posparto ya que se trata de un proceso fisiológico y de una experiencia profunda de mucha trascendencia para la mujer, su familia y la comunidad, en el que la mujer es la protagonista.
Este modelo se inscribe en un movimiento mundial por los derechos y el respeto al nacimiento en donde la familia protagoniza su parto en un ambiente tranquilo y cálido junto con las personas por las que desea estar acompañada.
Cuenta con información certera y trato respetuoso y propicia que se viva una experiencia consciente, digna y profunda.
Es en el ámbito del parto planificado en domicilio en donde las parteras podemos aplicar ampliamente la continuidad de cuidados.
Es muy gratificante poder trabajar con este modelo, exige a la vez una responsabilidad y una autonomía a la cual las parteras no estamos acostumbradas en la actualidad, ya que décadas atrás era habitual en el ejercicio este tipo de atención.
Trabajar en este modelo de atención permite profundizar temas concernientes a la historia de cada mujer y su familia y su impacto en la mater-paternidad. Da la oportunidad de crear un vinculo que propiciara todos los eventos por venir y permite considerar a cada mujer en su individualidad, inmersa en su realidad emocional, espiritual y social.
Trabajando en este modelo sentimos nuestro “SER PARTERAS” en forma plena. El acompañamiento en el puerperio (con todas las manifestaciones fisiológicas y emocionales que implica) es fundamental ya que es un periodo trascendental para la madre, su bebe y para la familia completa. Las familias valoran enormemente este acompañamiento luego de haberlo recibido.
Este modelo de atención que adaptamos a nuestra práctica profesional es inherente al ejercicio de la partería. Considera acompañar a la mujer en todos los eventos de su vida reproductiva (educación sexual, consejería en anticoncepción, encuentros pre-concepcionales).
En el modelo de atención que aplica la continuidad de cuidados, la misma partera asiste a la mujer y su familia a lo largo del curso de la gestación, trabajo de parto, parto y las primeras seis semanas del postparto. Este tipo de asistencia permite un vínculo que va más allá de la asistencia en un momento determinado. Se generan lazos profundos de confianza y respeto mutuos.
En nuestro país los programas de formación de parteras cuyo título es Licenciada en Obstetricia, capacitan para poder ejercer en este modelo de continuidad de cuidados. También las leyes vigentes del ejercicio de la profesión (Ley Nacional 17132 – Ley de la Povincia de Buenos Aires 11745 y 14802) avalan este tipo de atención. Pero el sistema de salud público y privado vigente no contempla la aplicación de este concepto en toda su magnitud.